Panamá conoce experiencia exitosa de alimentación escolar en Brasil

Representantes del Gobierno de Panamá realizaron una visita a Brasil para conocer su modelo exitoso de alimentación escolar, que asiste todos los días a más de 42 millones de niños y adolescentes con menús saludables.

La delegación estaba encabezada por el viceministro de Infraestructura del Ministerio de Educación, Ricardo Sánchez, que fue acompañado del director general de Educación, Guillermo Alegría, representantes del Ministerio de Desarrollo Social y del Ministerio de Desarrollo Agropecuario.

Según el viceministro de Infraestructura la gira fue muy fructífera porque se pueden adaptar componentes del programa de alimentación escolar de Brasil a "Estudiar sin hambre", que busca impactar a unos 500 mil niños a nivel nacional, primero en áreas vulnerables y de difícil acceso, para luego escalarlo sucesivamente.

Los técnicos conocieron de primera mano las instalaciones brasileñas, a través de visitas a diversas escuelas públicas de Brasilia, donde observaron los servicios de preparación de alimentos, los comedores escolares y los huertos pedagógicos, y pudieron conversar con los nutricionistas y cocineros acerca de los menús.

También se reunieron con los gestores públicos responsables de la alimentación escolar a nivel federal, bajo responsabilidad del Fondo Nacional de Desarrollo de la Educación, y de la Secretaria de Educación del Distrito Federal, responsable de las escuelas visitadas.

“El modelo brasileño es impresionante. El nivel de coordinación interinstitucional y el apoyo de los municipios es vital para el éxito del programa", señaló el viceministro de Educación, que también resaltó como puntos positivos los recursos destinados, las instalaciones de las escuelas y la cualificación del personal.

Para conocer la vinculación de los agricultores familiares a la alimentación escolar, las delegaciones visitaron dos cooperativas y conocieron su experiencia en el programa: la cooperativa Cootaquara, con 300 asociados, en Distrito Federal, y Coopindaiá, con 350 asociados, en el municipio de Luziânia, en Goiás.

Las representantes de la Secretaria de Educación de Luziânia también presentaron el funcionamiento del programa, que compra a los agricultores locales el 80% de los productos que se consumen en las 66 escuelas públicas del estado, beneficiando a 23 mil alumnos.

Creado hace 64 años, el Programa Nacional de Alimentación Escolar asiste a los alumnos de toda la enseñanza básica (educación infantil, primaria, secundaria y educación de jóvenes y adultos). En Brasil, desde el 2009, por ley, los municipios brasileños tienen que comprar por lo menos 30% de productos originados de la agricultura familiar para alimentación de los estudiantes.

“Las políticas de alimentación escolar y agricultura familiar en Brasil existen hace muchos años y el programa de alimentación escolar puesto como una política de Estado garantiza su sostenibilidad”, añadió Plínio Pereira, analista de proyectos de la Agencia Brasileña de Cooperación.

Por su parte, el Representante de FAO en Brasil, Rafael Zavala, explicó que esta misión es una gran oportunidad para conocer un modelo de intersectorialidad que combina estrategias de inclusión económica de los agricultores familiares con la estrategia de nutrición, alimentación y de educación.